Este órgano se localiza en una prolongación lateral del coro alto de la iglesia del Monasterio de San Zoilo, en su lado de la Epístola. Aunque se podría decir que tiene una posición exenta, realmente existe un espacio reducido entre el instrumento y la pared, el cual permite el acceso al interior del mismo.
Dicho instrumento fue construido por un autor desconocido en 1804 y posteriormente restaurado por Juan Pérez en 1887.
Su atractiva caja luce una tubería dispuesta en tres castillos del tipo torreón y otros dos intermedios planos, de doble campo, conteniendo tubos canónigos los superiores.
Las fachadas laterales contienen cada uno un castillo de tubos de contras con su bocas orientadas hacia el interior de la caja.
La trompetería horizontal se despliega en grupos, de forma que bajo cada torreón arrancan dos líneas en abanico y bajo caja uno de los castillos planos un medio abanico de forma simétrica.
Posee una curiosa consola en ventana que se compone de un teclado, tiradores de registros y un grupo de pisas para los contras.
Las transmisiones de teclado y registros son manuales.
No se ha localizado ningún rastro del fuelle, encontrándose el instrumento en un estado tal que no permite de ninguna forma su operatividad.